Pablo Medina / Venezuela RED Informativa.us
Joe Biden está promoviendo una reunión en California para mediados de junio, con el objeto de frenar el avance del populismo en nuestro hemisferio. Suponemos que, en esa edición especial de la Cumbre de las Américas, el primer mandatario norteamericano aprovechará la ocasión para renunciar a su cargo. Echarse al lomo a la señora Harris y al resto de sus fenómenos, y así empezar a predicar con el ejemplo desde casa.
Sin un aparato formal y bien montado, que sirva efectivamente como contrapeso real a los objetivos del Foro de San Pablo. Sin políticas posibles y funcionales para recuperar a los países atrapados bajo la sombra de la maldad. Lo mismo que sin acciones desde lo público y desde lo multilateral que apunten a la construcción de una verdadera inclusión social, que detenga el abismo cada vez más profundo que se abre año tras año entre ricos y pobres en esta parte del mundo. Sin eso, como agenda mínima, es hablar paja.
Sin dar la cara con valentía a través de experiencias como la red de redes, Doble R, Resistencia Republicana, todo lo que se haga será juego de muchachos. Ya es tiempo de hacer las cosas EN SERIO.
