REINCIDENTES

Yolanda Medina Carrasco / Venezuela RED Informativa.us
Lo que es igual, no es trampa. Compañías petroleras norteamericanas le exigen al Congreso de este país, que les permitan operar en Venezuela. ¿Qué tiene Chevron que no pueda tener Schlumberger, Halliburton. Bakes Hughes o Weatherfor International?
Pues Chevron tiene mucho más poder, dinero e influencias sobre el partido Demócrata que todas ellas juntas.
Además, la paciencia franciscana de haber aguantado por más de cinco años las restricciones Trump. Haberse quedado en Venezuela, solo con oficinas en Maracaibo, y tratar de hacernos llorar por su mala suerte por sus “maltrechas” relaciones con el régimen de Caracas. Es decir, ¡puro cuento!
De todas maneras, pinta que pronto, muy pronto, las grandes contratistas norteamericanas que hacen que el negocio petrolero sea algo más que valores de contabilidad, regresen a nuestro país.
Hace mucho tiempo que “picaron” EMI y REPSOL. Italia y España siempre han sido estados carroñeros en Venezuela. Siempre se comen los restos que dejan las Águilas, que ya, definidamente, no nos protegen más.
La “exitosísima” administración Biden/Harris desmanteló la autosuficiencia energética que había construido tras cuatro años de trabajo Donald Trump, de un plumazo y el primer día de mandato en este país.
Ahora nos dicen que están contra la espada y la pared en el tema del suministro de petrolero. Y sus expertos voltean la mirada “inocente” hacia la destrozada Venezuela, que flota sobre un océano de crudo. Y, todos ellos, con los angelitos del Banco Interamericano de Desarrollo, la oposición, los “los abajo firmantes” y un bojote de enchufados más, haciendo coro.
Es que, para todos ellos, para toda la cuerdita de aguantadores de la dictadura de Caracas, ¿cuál es el problema en asociarse con docenas de bandas dedicadas al delito a nivel mundial, para hacer buenos negocios con un precio de la gasolina escandalosa, como el que pagamos ahora en América? ¡Ninguno!
Como tampoco importa que el combustible que va a llegar de Venezuela, muy pronto, venga manchado por la sangre de todo un pueblo oprimido. Negocios son negocios.