SEÑORA UZCÁTEGUI, USTED SABE QUE EN VENEZUELA HACE AÑALES QUE NO SE ELIGE, SOLO SE VOTA

Yolanda Medina Carrasco / Venezuela RED Informativa.us
Igual que con aquel remedo de referéndum que montó la gente de la oposición hace años con Guaidó, Henry Ramos y hasta la doctora Blanca Rosa Mármol de León que no tenía ni pies ni cabeza, así se les está viniendo abajo el castillo de cartas de las primarias a los adictos al voto sin sentido en Venezuela.
No solo no es suficiente querer y hasta poder hacerlo, lo importante es el resultado final que se quiera alcanzar. Si se trata de exhibir en vitrina a toda la flora y la fauna de los políticos venezolanos, muy bien. Pero si se trata de tomar en serio a un hombre o a una mujer que sepa, que haga valer, que imponga a como dé lugar los resultados en las elecciones de 2004 en contra de Maduro, eso es otra cosa.
Yo no sé si la señora María Carolina Uzcátegui está clara o no sobre lo que tenemos realmente que hacer para recuperar al país. Tampoco tengo claro que la señora Uzcátegui se pueda creer que Venezuela es un país donde la banda de mafiosos que están pegados al poder desde hace casi 25 años se la van a tomar en serio a ella y a los otros personajes de la junta electoral de las primarias a la hora de aceptar democráticamente abandonar Miraflores. A mí no me suena que Diosdado y el resto de su orquesta, tras la hipotética aparición de unos resultados electorales adversos, entreguen el poder por las buenas, por la democrática.
Si la señora Uzcátegui está realmente clara y consciente que ni ella, ni la oposición, ni las mejores voluntades están en capacidad real de sacar a estos bichos con votos y por las buenas, todo está bien. Bienvenida entonces señora Uzcátegui al barco de aquellos que estamos tratando de recuperar al país por otras vías, sin seguir entusiasmando a la gente con cuentos chinos.
Pero ayude, por favor: todavía quedan venezolanos con la misma adicción perjudicial de las salidas electorales en Venezuela. Aproveche y cuéntele al país que, lamentablemente, la puerta de salida electoral está cerrada desde el referéndum revocatorio en contra de Hugo Chávez en 2004. Que no se trata de que el consulado en Miami de Venezuela esté cerrado o abierto. Que no hayan logrado empadronar a los millones de venezolanos que están por medio mundo, cuenteándoles sobre el falso valor de su voto, mintiendo acerca de que los que estamos afuera, vamos a torcer la suerte de todo un país.
¡Porque todos sabemos que eso es mentira! Dígale a la gente, señora Uzcátegui, que en Venezuela hace añales no se elige, solo se vota. Que no tiene objeto alguno tener un contrincante ganador en las primarias con toda la intención de cambio, pero que cuando le toque medirse con Maduro y sus trampas resulte aplastado por una maquinaria de fraudes, inyecciones de votos en remotos, sala de totalización chimba del CNE y ningún líder moviendo al país el día después para hacer valer la decisión de la gente.
Aproveche sus poquísimas minutos de fama, señora Uzcátegui: ¡Dígale la verdad a Venezuela!