Para los bolichicos, los enchufados, narcomilitares bolivarianos y chivos del régimen de Caracas, todo pinta que el Niño Jesús les va a llegar buchón. Es que, luego de varios años trancados, en cualquier momento les liberan lo que tanto esperan, el tráfico de los Bonos Chatarra de PDVSA.
Y como siempre; ¡ellos como si nada y el resto del país, sin nada!
Por años enviaron cientos de cartas a los Reyes Magos, a los magos de Wall Street y a los políticos más arrastrados de la Norteamérica fea, para tratar de salvar aunque fuese un pico sobre tanta plata chueca.
Y, muy pronto, en premio de haber hecho sus tareas, arreglarse con la administración de Joe Biden, decir que van a Elecciones Libres por recomendación hasta de Gustavo Petro entonces, en ese desbarajuste llamado Venezuela, nunca pasó nada. ¿Qué tal?
Cientos de millones de dólares en dinero de mentira, usado para cubrir déficit fiscal y abrir otro espacio para el robo y para el desvalijamiento del tesoro de la república, sirvieron por años tras años para pagar cupones de rendimientos estratosféricos y reciclar muchas veces los mismos montos para colocar otra y otra emisión de bonos. Eso fueron los Bonos PDVSA en todas sus versiones. Otro colosal fraude financiero: pidiendo al mundo plata dizque para mejorar PDVSA, que terminó en las cuentas de todos estos zánganos, mientras nuestra principal industria se convertía aceleradamente en chatarra.
Complicados e implicados: la banca internacional, los grandes agentes bursátiles de Wall Street y la eterna cómplice banca venezolana. El uso de esos papeles, fundamentalmente, fue para lavar dólares sucios y amasar grandes fortunas, por la misma clase de vagos y maleantes de siempre.
Hoy, a la luz de las nuevas relaciones entre Maduro y sus secuaces con la Norteamérica de Joe Biden, el entramado de los también nuevos y escandalosos negocios con el crudo venezolano, cuyo destino es Estados Unidos, todo vuelve a funcionar como antes.
Y lo que por petróleo les llegó a muchísimos de estos mafiosos en forma de cupones y rentabilidad en dólares, en muchos casos por encima del 13% anual, gracias a los nuevos amigos del régimen, también por petróleo les regresará. Es que en Venezuela el petróleo da para todo ¡Qué desgracia!
