LA OPOSICIÓN VENEZOLANA QUE VAYA A LLORAR PAL’ VALLE

Yolanda Medina Carrasco / Venezuela RED Informativa.us
Como recordaba mi hermano Pablo en unos de sus más recientes Criterios. La historia de Boabdil, el último sultán de Granada, vuelve a ser de utilidad para explicarnos a la Venezuela del siglo XXI.
Luego de que los reyes católicos conquistaran Granada, Boabdil, junto con su séquito, escapa antes que Fernando e Isabel lo hagan prisionero. En alguna parte del camino de la huida se detiene a contemplar la alucinante vista de la última ciudad mora que quedaba en España y de su hermosísima Alhambra, y se echa a llorar.
Cuenta la leyenda que su madre, que se iba junto con él se le acerca, lo mira y le suelta con desprecio: “lloras como una mujer lo que no supiste defender como hombre”.
Y es que así están los personajes de la comisión electoral de las primarias en nuestro país. A poquísimos meses del evento, Jesús María Casal se inventa “una” desde el derecho.
Desde el derecho y las tradiciones políticas completas y totalmente pisoteadas por la misma oposición. Es el caso que los negociadores de México, siempre en la búsqueda de complacer al NARCO-RÉGIMEN de Caracas, tratan de construir una nueva leyenda.
El presidente de la comisión electoral de la oposición sale con “una” que, ni en sus mejores momentos, se habría atrevido a soltar Henry Ramos. Casal trata de vender, a cualquiera que se lo quiera comprar, que, de ganar en las primarias alguno de los candidatos sobre los que el régimen les ha colgado la barbaridad de las inhabilitaciones, con el solo mensaje del pueblo votante, tendría que ser suficiente para que Miraflores afloje las medidas y “permita” medirse con Maduro al precandidato que resulte ganador en las presidenciales de 2024.
Así, en un simplísimo 2 más 2 son 4: María Corina, por ejemplo, sale triunfadora en las primarias y el régimen se rinde ante la legitimidad producida por una importante capa de la población que la escogió como abanderada de la oposición. Según Casal, la presión popular obligaría a Maduro a suspender las medidas de inhabilitación inventadas en contra de María Corina, dándole luz verde para que se postule como candidata a la presidencia.
Y así María Corina se presenta a las elecciones presidenciales en contra de Maduro: las gana, los pillos del siglo XXI reconocen que ellos perdieron y entregan el gobierno, y todos felices comiendo perdices.
Como decía Rolando Laserie: ¡De película! ¿Luego de haber reconocido y legitimado al régimen, Blyde y los negociadores de sus propios negocios en México, todavía creen que del “otro lado” funciona el asunto igual pero al revés? Luego de haber juntos pisoteado el concepto de legitimidad, legalizando a un régimen que se robó dos elecciones presidenciales consecutivas, Casal supone que el NARCO-RÉGIMEN de Maduro va a tener las mayores consideraciones democráticas con aquello de “la voz del pueblo, es la voz de Dios”.
Ya sabemos que para conseguir aproximarse a algo parecido a este disparate, tendríamos que matarnos los unos con los otros; digo, para obligar a que se reconozca finalmente la voluntad popular de la mayoría de los venezolanos que el régimen lleva años ignorando.
¿O no?
La oposición en Venezuela hace mucho tiempo que pateó el respeto por la legitimidad y la exigencia por el respeto de la voluntad popular del pueblo venezolano. Y lo hizo a conciencia, para poder hacer “buenos” negocios con un régimen corrupto y corruptor, por dinero sucio y fácil. Ahora, como se dice en criollo: ¡les toca ir a llorar pal’ valle!